Slingshot, el Snapchat de Facebook que busca el diálogo con imágenes

La aplicación de Facebook creada para competir con Snapchat como aplicación de envíos efímeros tiene el mismo principio en común, pero contiene algunas características que la hacen diferente.

Slingshot busca el diálogo con imágenes

Facebook se interesó por Snapchat hace ya unos meses intentando adquirirla por 3.000 millones de dólares, pero sus propietarios no aceptaron la compra. Ante la imposibilidad de hacerse con la nueva aplicación que tanto éxito cosechó de forma repentina, decidió crear la suya propia. Hace algo más de un mes que apareció en USA Slingshot (tirachinas sería la mejor traducción) como aplicación propiedad de Facebook para los dispositivos móviles. Pero ya está disponible para un gran número de países, entre ellos España.

Se puede instalar desde las tiendas virtuales de iOS y Android y para este último, se requiere que la versión sea al menos la 4.1.

Algunas características que la hacen diferente

Veamos qué ofrece esta aplicación y qué la hace diferente de su mayor competidora.

  • Solo funciona en teléfonos, requiere un código que recibimos por SMS para completar la instalación, para ello nos pide que registremos nuestro número de teléfono.

Slingshot busca el diálogo con imágenes

  • Sobre las imágenes a enviar podemos dibujar con el dedo líneas de diferentes grosores y colores. También escribir texto de hasta 140 caracteres y modificar el tamaño de la letra.
  • Permite el envío de imágenes y vídeos de hasta 15 segundos de duración.
  • De uso muy sencillo, aunque está todavía todo en inglés. Solo con abrir la aplicación ya tenemos la opción de hacer la foto o el vídeo si mantenemos pulsado el disparador. También aparece un botón para cambiar a selfie (cámara frontal) de inmediato. Después elegimos el destinatario y “lanzamos” la foto.
  • Pero lo que la hace realmente diferente es el requisito necesario para ver las imágenes recibidas, la reciprocidad del sistema. Cuando alguien nos envía una foto o vídeo, recibiremos la notificación pero no podremos verla a menos que le enviemos algo también. Un contacto puede enviarnos una imagen o una serie de ellas, a modo de historia, que tan solo podremos ver si le enviamos algo nosotros.

Slingshot busca el diálogo con imágenes

Para desbloquear el envío, primero tienes que lanzarle algo de vuelta
  • Los mensajes y sus imágenes, una vez vistos desaparecen y ya no podemos volverlas a ver, al estilo de Snapchat.
  • Las fotos pueden verse durante el tiempo que queramos, no tienen un tiempo de visionado limitado por el emisor, como ocurre en Snapchat. Pero cuando la eliminamos de la pantalla ya no podremos volverla a ver.
  • Si el receptor hace una captura de pantalla de la imagen, el emisor no recibe ningún mensaje de alerta.

En mi opinión, Facebook ha acertado bastante en el diseño de la aplicación, tanto por su uso sencillo y amigable como por la filosofía que esconde su sistema que obliga a responder. Desde luego no es una aplicación pensada para la mayoría de usuarios de teléfonos móviles, pero sí para ese sector tan importante, la mayoría jóvenes y niños, que disfrutan enviando fotos a sus amigos de todo lo que hacen durante el día.

El sistema obliga a crear un diálogo entre emisor y receptor que potencia aún más el envío “compulsivo”. En el futuro podríamos ver extenderse mucho su uso en determinados perfiles, pero aún es pronto para saberlo, el tiempo nos lo dirá.

En cualquier caso, lo peor que podría ocurrir es que los usuarios tomaran esta aplicación como la apropiada para enviar imágenes y vídeos de contenido sexual, el sexting. Ya comentamos en su momento la inseguridad de Snapchat en este sentido. Ninguna aplicación es segura para estas acciones, quien recibe el mensaje tiene siempre medios para capturarla antes que desaparezca.

Los riesgos del sexting ya los hemos mencionado en multitud de ocasiones pero siempre viene bien recordarlos cuando hablamos de aplicaciones que autodestruyen los mensajes, no lo hagas ni lo provoques a los demás. Además del daño que te puedes provocar, si se trata de un menor será considerado como un delito.