La tecnología informática, además de los avances tan atractivos para todos los jóvenes, como vídeo juegos online, redes sociales, etc, a veces nos trae sorpresas no tan agradables, al menos para algunos.
Es habitual utilizar Internet como herramienta de consulta para elaborar trabajos o ejercicios que tenemos que hacer como tareas escolares, desde el colegio a la universidad. Y también es frecuente encontrar algún artículo o texto que se ajusta tanto a lo que buscamos que simplemente utilizamos el copiar y pegar.
Y como los profesores también usan Internet, claro, esto lo saben. Seguro que invierten mucho tiempo y esfuerzo en detectar qué trabajos son originales y cuáles son copiados directamente de Internet. Esto también es una preocupación en otros ámbitos profesionales, como son escritores, investigadores, en editoriales, etc.


Si le preguntaras a todos los “nativos digitales” qué están haciendo en el ordenador, probablemente te responderán cosas muy distintas. Unos se centrarán más en el uso de las redes sociales y la mensajería instantánea; otros, sin embargo, pasarán más tiempo ocupados con los juegos online o los videojuegos para PC. Evidentemente también es un herramienta de trabajo para muchos de nosotros, pero en general, apostaría que te responderán todos lo mismo: “me divierto con esto”.
El pasado día 10 de mayo, en el Congreso Nacional de 
