(N.d.E. De nuestra nueva colaboradora Paloma, de quien esperamos muchas más entradas. Gracias.)
Cuando nos comunicamos con otras personas por medio de mensajes o chat por Internet, nos resulta más fácil expresar nuestros sentimientos. Perdemos ese punto de timidez que da la relación directa o personal y nos escudamos en una falsa sensación de anonimato.
Las redes sociales como Facebook y Tuenti han abierto una puerta a esa comunicación sin tapujos, nos resulta mucho más cómoda si lo que pretendemos es decir algo que nos da vergüenza expresar “a la cara”.

Ya conocemos la importancia que tiene twitter en el mundo de la comunicación. No hay día que no se mencione en los telediarios, tertulias en la radio o cualquier medio de información. Sabemos que está detrás de muchos movimientos sociales que están teniendo una enorme repercusión afectando a países enteros y sus gobiernos. Tiene seguidores de toda condición, en todos los países, de todas las edades, con fines profesionales, educativos, de ocio, revolucionarios, etc.
Existe una situación bastante conflictiva, bastante extraña que hace a los adolescentes pegar un grito, poner cara de asombro o incluso, saltar de la silla: Abrir tu tuenti, encontrarte con una petición de amistad y, para tu asombro, encontrarte con que tu padre, o tu madre, quiere ser tu amigo. La primera reacción de una adolescente es de asombro: Facebook vale, pero tuenti, ¿Para qué querrá mi padre tener tuenti?. Tras las cuestiones, llegan las suposiciones más frecuentes: A ver si se lo ha hecho para vigilarme, o para ver qué hago yo en cada momento. Y por último la gran pregunta final, que no es cuestionarse si se le acepta o no, si no decidir cómo se le explica a un padre que no lo quieres en tu lista de contactos. 
Querido Internet:
Soy un padre normal con tres hijos normales que todavía son pequeños ya que el mayor tiene solo 9 años. Por lo que hasta ahora no me afectaban los peligros que entrañan las redes sociales e internet, … o al menos eso creía yo.
Si le preguntaras a todos los “nativos digitales” qué están haciendo en el ordenador, probablemente te responderán cosas muy distintas. Unos se centrarán más en el uso de las redes sociales y la mensajería instantánea; otros, sin embargo, pasarán más tiempo ocupados con los juegos online o los videojuegos para PC. Evidentemente también es un herramienta de trabajo para muchos de nosotros, pero en general, apostaría que te responderán todos lo mismo: “me divierto con esto”.