(N.d.E. De nuestra nueva colaboradora Paloma, de quien esperamos muchas más entradas. Gracias.)
Cuando nos comunicamos con otras personas por medio de mensajes o chat por Internet, nos resulta más fácil expresar nuestros sentimientos. Perdemos ese punto de timidez que da la relación directa o personal y nos escudamos en una falsa sensación de anonimato.
Las redes sociales como Facebook y Tuenti han abierto una puerta a esa comunicación sin tapujos, nos resulta mucho más cómoda si lo que pretendemos es decir algo que nos da vergüenza expresar “a la cara”.

Existe una situación bastante conflictiva, bastante extraña que hace a los adolescentes pegar un grito, poner cara de asombro o incluso, saltar de la silla: Abrir tu tuenti, encontrarte con una petición de amistad y, para tu asombro, encontrarte con que tu padre, o tu madre, quiere ser tu amigo. La primera reacción de una adolescente es de asombro: Facebook vale, pero tuenti, ¿Para qué querrá mi padre tener tuenti?. Tras las cuestiones, llegan las suposiciones más frecuentes: A ver si se lo ha hecho para vigilarme, o para ver qué hago yo en cada momento. Y por último la gran pregunta final, que no es cuestionarse si se le acepta o no, si no decidir cómo se le explica a un padre que no lo quieres en tu lista de contactos.
Los peatones tecnológicos ni ven ni oyen, son como ‘zombis’ deambulando por aceras y calzadas sin prestar atención a nada de lo que les rodea. Completamente ensimismados tropiezan con otros peatones, con farolas o árboles, cruzando calles sin mirar, caen en zanjas, fuentes o vías de metro… A menudo tenemos noticias relacionadas con accidentes más o menos graves causados por distracciones de peatones.

Pero, quizá porque todavía nos queda el recuerdo del móvil tradicional, la mayoría de usuarios de smartphones no ha tomado aún una de las medidas más habituales que tomaría para su PC o portatil con la finalidad de mejorar su seguridad, es decir, instalar un antivirus. Claro, los móviles de antes no necesitaban antivirus y parece que por esa razón nos cuesta mucho cambiar de costumbre. Pues tenemos que modificar esta mentalidad y concienciar a todos los usuarios de estos dispositivos que son tan vulnerables o más que los ordenadores normales.
Es tan alto el número de robos de contraseñas, suplantaciones de identidad u otros problemas parecidos en Tuenti, que la propia Red ha creado una iniciativa llamada “Plan Contigo”. Consiste en un usuario más de Tuenti, que se puede buscar simplemente con el término “contigo” y que pertenece a la Policía Nacional y la Guardia Civil. Actualmente tiene aproximadamente 70.000 seguidores. Además de dar consejos y noticias, ponen a disposición de todos los usuarios un correo electrónico, plancontigo@mir.es, donde realizar consultas directamente.
Además estos aparatitos son capaces de saber dónde se encuentran en todo momento, aunque no les hayamos conectado el GPS. Éste último les dará una mayor precisión, pero no es imprescindible. Esto abre un enorme abanico de posibilidades. Por supuesto, pueden usarse como navegador con su GPS, pero no es eso lo más interesante. En cualquier momento puedes preguntarle dónde encontrar cualquier cosa, como cines, restaurantes, discotecas, estaciones de metro, paradas de bus, lo que se nos ocurra. Pero lo más alucinante es que podemos llegar a saber dónde están nuestros amigos e incluso pedirle que nos indique el mejor camino para llegar a ellos. En un momento dado podemos ver en un mapa y a tiempo real la situación de todos nuestros amigos que hayan seleccionado compartir su posición.