Disponer de conexión a Internet en el extranjero aún resulta caro. Es cierto que las tarifas aplicadas por “roaming” (así se conoce al uso de la Red cuando salimos de nuestro país) han descendido notablemente pero salvo excepciones. como algunos contratos con Vodafone y para ciertos países, todavía puede seguir saliéndonos caro si consumimos datos de una forma habitual.
La Comunidad Europea ha fijado la fecha del próximo 15 de julio de 2017 como límite para que los países miembros eliminen las tarifas de roaming por completo. Mientras tanto, deberemos pagar suplementos por los consumos fuera de nuestras fronteras y especialmente si viajamos a países no miembros de la CE o a otros continentes.
Una forma de solucionar en parte nuestro “apagón” de conexión cuando viajamos es hacer uso de los puntos Wifi gratuitos de ciertos locales o establecimientos, como aeropuertos, restaurantes, cafeterías, hoteles, etc.



La mayoría de nosotros llevamos dispositivos móviles conectados a Internet a todas partes, incluso en el período de vacaciones. No obstante, son diversas las circunstancias por las que precisamente en este período tenemos más posibilidades de conectarnos a ordenadores ajenos, como los que nos proporcionan en zonas comunes de los hoteles o locutorios en el extranjero.
Quienes estén pensando en viajar por Europa a partir de ya, se van a encontrar con una agradable novedad. Los precios del roaming o itinerancia, es decir, las tarifas para voz y datos cobradas por las compañías a los extranjeros, son ahora un 50% más económicas de media.
¿Qué te parecería poder hacer un viaje pagando, aproximadamente, solo la parte del combustible que te corresponde?
Para la entrada de hoy nos situamos en el “polo opuesto” de esta seguridad y privacidad, al comentar las posibilidades de Free Zone Wifi, aplicación para dispositivos móviles que no solo nos encuentra las redes wifi abiertas y disponibles en cualquier lugar del mundo, sino que además nos conecta automáticamente a la más próxima si así lo configuramos.
Navegar desde el móvil en el extranjero puede costar hasta 75 veces más caro que desde España. Y ello a pesar de que, según la normativa europea, desde este 1 julio el coste máximo de internet móvil en ‘roaming’ desde Europa se ha reducido de 70 a 45 céntimos por megabyte (más IVA). Con algunos bonos de datos navegar desde España cuesta 0,6 céntimos por mega.