Los juguetes sexuales conectados a Internet suponen un importante riesgo para la privacidad de sus usuarios. Si no se gestionan adecuadamente, las consecuencias pueden llegar a ser muy graves.
El término “sexnología” (sexo + tecnología) apareció hace ya unos años, cuando surgieron los primeros dispositivos conectados a Internet destinados a los juegos y placeres sexuales.
LEER MÁS