Los navegadores que utilizamos en nuestros ordenadores para realizar todas las actividades en Internet se han convertido en herramientas cada vez más polivalentes.
En un principio se utilizaban para ‘navegar’ de forma más o menos pasiva, pero con el paso del tiempo han ganado protagonismo, porque muchas de las tareas que necesitaban aplicaciones independientes, se pueden hacer ahora con el propio navegador.
Una herramienta para mi imprescindible es un corrector ortográfico instalado en el propio navegador que supervise todos los textos que escribimos. Nos será útil para comunicarnos por redes sociales, escribir correos electrónicos, comentarios en foros o blogs, formularios de cualquier tipo e incluso para crear documentos en la nube, como en Google Docs o presentaciones de diapositivas también de forma online.
El navegador Chrome de Google, uno de los más utilizados en el mundo, viene ya con un corrector ortográfico instalado. Todo usuario de Internet que desee cuidar mínimamente su imagen a la hora de comunicarse mediante escritos debería activar y aprender a utilizar la herramienta.
