Hace ya más de cuatro años, allá por el año 2007 cuando se empezaron a expedir los primeros DNI electrónicos (DNIe) en España. Después de cuatro años ya disponemos de él más de 25.000.000 de españoles.
Nace ante la necesidad de otorgar identidad personal a los ciudadanos para su uso en la nueva sociedad interconectada por redes de telecomunicaciones. Es muy similar al anterior, sólo que ahora cuenta con un ‘chip’ que almacena nuestra información de forma cifrada.

Su finalidad es que podamos hacer gestiones de manera segura a través de medios telemáticos, asegurando la identidad de los participantes en cada comunicación. Asimismo debe incrementar la confianza del ciudadano ante las gestiones electrónicas y por tanto elevar el número de servicios prestados por estos medios. Son muchas las gestiones disponibles ya en la Administración que podemos realizar de forma telemática utilizando el DNIe y se espera que las entidades financieras lo adopten también cuando esté suficientemente desarrollado.



Es origen de varios de los problemas comunes en Internet y conocidos por todos como el
Tuenti es una red social que se ha extendido enormemente, principalmente entre los jóvenes y niños de nuestro país. Desde que apareció sobre el año 2006 ha crecido extraordinariamente hasta tener en la actualidad más de 10 millones de usuarios. Lo curioso es que para darse de alta como usuario es necesario una invitación de alguien que ya esté registrado anteriormente, por tanto es de acceso restringido.