En estas fechas empieza un nuevo curso escolar para todos los niños y jóvenes de nuestro país. En general, el sentimiento de todos los chicos y chicas será de resignación, al fin y al cabo en vacaciones se vive mejor que en época de estudio.
Pero desgraciadamente para algunos la sensación de asfixia y tormento será mucho mayor. Me refiero a aquellos que el año pasado ya sufrieron los ataques de sus “compañeros” a través de las redes sociales y otros servicios de mensajería por Internet, las víctimas del ciberacoso.
Quizá en verano el hostigamiento ha cesado o se ha visto reducido en gran medida, pero probablemente, el hecho de regresar a las aulas será suficiente para que regrese el conocido calvario.
El ciberbullying o ciberacoso se da habitualmente entre iguales, normalmente niños y jóvenes, y utiliza los medios de las nuevas tecnologías para insultar y burlarse de los compañeros. Como cada vez las tecnologías y especialmente los teléfonos inteligentes están presentes a edades más avanzadas, el fenómeno aparece antes en la vida de los escolares.


En esta ocasión compartimos las conclusiones más relevantes extraídas de los datos que han recopilado utilizando sus programas de control parental instalados en los ordenadores de los países de la Unión Europea. El estudio trata de averiguar cuáles son los temas “prohibidos” para los menores que les suscitan un mayor interés. Mide el número de veces que intentan acceder a categorías tales como pornografía, drogas o software ilegal entre otras.
La aplicación para dispositivos móviles “Protégete” que ha sido presentada recientemente, tiene como objetivo servir de ayuda a los menores que sufren algún tipo de acoso en Internet. Se puede descargar gratuitamente desde las tiendas oficiales para 
Las aplicaciones de moda de los dispositivos móviles conectados a Internet, smartphones y tablets, cambian y evolucionan a gran velocidad. Durante el pasado año ha crecido enormemente el uso de Instagram, red social basada en el envío de imágenes que se ha popularizado especialmente entre los más jóvenes. Así que, no es de extrañar que algunas personas se pregunten sobre los riesgos que conlleva esta nueva versión de red social.

