Son frecuentes las consultas que nos hacen llegar nuestros lectores sobre el posible espionaje en sus propios teléfonos móviles. Nos preguntan a través de los comentarios de nuestro blog y por medio del formulario Pregunta lo que quieras y suelen contarnos historias relacionadas con los celos que, fundada o infundadamente, desembocan en situaciones de desconfianza y posible espionaje.



No obstante, existen métodos que podemos utilizar para “espiar” lo que hace el destinatario con nuestro correo. Muchos de los mensajes que recibimos tienen fines comerciales, siendo especialmente en esos casos en los que podemos encontrar con más frecuencia estos sistemas de rastreo.
En algunas ocasiones nos han llegado comentarios al blog acerca de cuentas de Facebook que aparecen y desaparecen, amigos que de repente ya no se pueden encontrar en la red social, incluso se ocultan sus publicaciones, aunque posteriormente vuelven a mostrarse. Serían como cuentas espía que solo se dejan ver muy de vez en cuando pero que visitan nuestros perfiles cuando quieren.
Esta es una de esas aplicaciones para móvil que indudablemente causan división de opiniones entre los usuarios. Unos la apoyarán y la verán como la herramienta definitiva que andaban buscando pero otros la calificarán de “aplicación despreciable donde las haya”.