Twitter es una red social que está alcanzando una repercusión nunca vista. Se cuentan a cientos de millones los usuarios que diariamente escriben y leen pequeños mensajes a todas horas del día y en todos los rincones del Mundo.
El crecimiento de la red es imparable, se ha extendido a muchos jóvenes y niños que, tentados por su popularidad la utilizan ahora incluso como medio de comunicación habitual con sus amigos.
Esta red social, aunque permite el envío de mensajes, imágenes y vídeos de manera privada, la realidad es que se utiliza esencialmente de forma pública. Y lo que es aún más importante y peligroso, cualquier mensaje puede llegar a extenderse por la red en un instante y ser visto por millones de personas en unos pocos minutos.
Por ello es tan importante pensar antes de tuitear, por la enorme repercusión y por la consiguiente imposibilidad de eliminarlo una vez reproducido.
Pero, además de utilizar el sentido común antes de publicar información propia o ajena en esta omnipresente red social, debemos conocer y aplicar unas sencillas reglas que el propio Twitter exige y que quizá no todo usuario conozca.


Memoto es una minicámara para registrar todo lo que haces durante el día, TODO. Tiene un tamaño similar al del un iPod shuffle (en la foto comparamos el tamaño con un bolígrafo) y realiza fotos automáticamente cada medio minuto cuando lo llevas puesto en la solapa, colgado del cuello, etc. Por el contrario si lo guardas en un bolsillo o similar se apagará.
Seguro que un tanto por ciento elevado de nuestros lectores utilizan habitualmente WhatsApp para comunicarse con familiares, amigos, compañeros de trabajo… Y ahora que muchos están de vacaciones esto es todavía más habitual.
En este blog hemos hablado muchas veces sobre la seguridad de nuestra información en Internet y, más concretamente, en Facebook. Ahora que estamos en verano, y tenemos más tiempo libre, hemos pensado que es un buen momento para ponernos al día en este asunto y comprobar que seguimos, al menos, las principales opciones de seguridad de Facebook.
Debemos tener en cuenta un par de cuestiones clave. Por un lado debemos saber que en LinkedIn existen dos perfiles: uno público, al que podrá acceder cualquiera (y por cualquiera entendemos “cualquiera” sin ninguna restricción) y otro privado, que sólo verán nuestros contactos en la red social.
